Va pasando el verano y hemos descansado,
pero también nos hemos complicado, implicado con personas y luchas que merecen
un esfuerzo. Nos hemos asomado a espacios, realidades, gentes que normalmente no
forman parte de nuestra vida… Ha sido tiempo para recorrer espacios distintos.
Y este verano nos hemos dejado envolver en espacios nuevos… el Islán y su
gentes, niños disminuidos físicos y
síquicos en tierras de Marruecos. Gracias a vosotros: Manuel, Esti, Ainhara,
Teresa, María y Sagrario.
Y que ahora esto se concrete en opciones
diarias, en compromisos pequeños o grandes, pero siempre auténticos, en pasos
que nos conduzcan a algún sitio. Abrir nuestros círculos pequeños a otros...,
involucrarnos en alguna lucha…, compartir
lo que tenemos y somos.