Cuantas veces me ha pasado de
tener que llamar por teléfono a los amigos y que no pueda ponerme en contacto
con ellos porque no hay cobertura. Estoy seguro de que les ha pasado también a
ustedes: que el teléfono móvil en algunos lugares no funciona… Bien, recuerde
que si en su vida no está Jesús ¡es como si no hubiera cobertura! No se
consigue hablar y nos cerramos en nosotros mismos. ¡Pongámonos siempre donde
funciona! La familia, la parroquia, la escuela, porque de esta manera tendremos
siempre alguna cosa que decir de bueno y de verdad. (Papa Francisco)