La presencia franciscana en África se remonta a tiempos de
Francisco. En los últimos años la Orden ha querido impulsar nuestra presencia convocando
a hermanos de todo el mundo para ir a África a compartir la vida, la oración y
el trabajo; dando testimonio del Evangelio y acogiendo en la Fraternidad a
aquellos a quienes el Señor inspire abrazar nuestra vida, salvo en Libia y en
Marruecos donde la acogida vocacional está prohibida expresamente por la
legislación civil.
En África hay unos 700 Hermanos y su número crece. Nuestras
fraternidades están compuestas por hermanos de diferentes nacionalidades, por
lo que nuestra presencia se caracteriza por la mullticulturalidad.
Los Hermanos con su vida junto a los oprimidos, junto a los sin
voz y a los marginados, son promotores de la paz y de la reconciliación en
muchas situaciones de conflicto, de confusión política y de guerra civil.
La cultura africana, dotada de ricos valores y llena de
preciosas cualidades humanas, puede enriquecer nuestro carisma y nuestra
Iglesia.
